Algunos sectores de la construcción advierten por posibles despidos y riesgos en la seguridad vial.
El Gobierno nacional oficializó el cierre de la Dirección Nacional de Vialidad, en el marco de un plan de reestructuración del Estado y privatización de servicios públicos. Así lo confirmó el vocero presidencial Manuel Adorni en conferencia de prensa, donde también detalló que serán disueltos otros organismos vinculados al transporte como la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
La decisión, impulsada por el presidente Javier Milei mediante un decreto que se publicará este martes en el Boletín Oficial, contempla la concesión al sector privado de unos 9.120 kilómetros de rutas nacionales. Según el Gobierno, el objetivo principal es reducir el gasto público, eliminar lo que consideran “nichos de corrupción” en la obra pública y fomentar la inversión privada.
En Alassia es Noticia, dialogamos con Horacio Berra, presidente de la delegación Córdoba de la Cámara Argentina de la Construcción, quien se mostró crítico ante la medida: “Creo que son parte de las cosas que no están bien. El país pierde 25 mil millones de dólares por la falta de mantenimiento, y el cierre de Vialidad solo representa un ahorro de 100.000 millones de pesos al año”.
Además, Berra consideró que la decisión es “desproporcionada” y opinó que “hubiera sido más inteligente que el organismo funcione mejor”.
Berra también subrayó la importancia del rol estatal como órgano de control, incluso en un esquema totalmente privatizado: “Vamos a suponer que el 100 % de las obras las hagan los privados. Eso no significa que debas eliminar Vialidad, que es un organismo de control”.